No negaré que el sorteo de grupos de la próxima Eurocopa sea la noticia más importante del día, quizá de la semana y puede que hasta del mes. No negaré que nadie en su sano juicio haría oídos sordos a la llamada de un buen anunciante que te empapele la portada de banners, interstitials y otros formatos del maligno. No negaré que es el momento idóneo para poner a los diseñadores a darle al Photoshop y hacer un despliegue sin igual de elementos decorativos e incluso informativos.
Pero creo que el orden debería primar por encima de todos esos conceptos y trabajar en la jerarquía informativa, el porcentaje de elementos gráficos sobre textuales y el impacto de la publicidad sobre esa jerarquía.